La Nintendo Switch se ha sometido a una nueva prueba gráfica por parte de Digital Foundry, esta vez comparando el Outlast 2 de la consola híbrida de Nintendo con la consola de sobremesa de Sony, la PlayStation 4. Lo más destacable es que la diferencia visual de ambas versiones no es tan grande como cabría de esperar.
Gran parte de culpa la tiene la resolución, inferior a los 1920 x 1080 píxeles de la PlayStation 4, pero que le permite mantener un alto nivel gráfico dadas las circunstancias de la propia consola. De esta forma, Outlast 2 se ejecuta a una resolución de 1280 x 720 píxeles en su modo portátil, mientras que en su modo TV, conectada al Dock Station, su resolución asciende hasta los 1792 x 1008 píxeles, una resolución bastante curiosa pero que permite ofrecer una imagen lo suficientemente nítida para disfrutar en un televisor.
Obviamente no todo es bajar resolución y esperar un milagro, por lo que hay una reducción gráfica en las texturas, las sombras y la oclusión ambiental para adaptar el juego, basado en el motor gráfico Unreal Engine 3, a la potencia limitada de la GPU. La única diferencia destacable a simple vista es la más típica de todas: Outlast 2 para la Nintendo Switch llega a una tasa de 30 imágenes por segundo mientras que la PlayStation 4 la duplica hasta los 60 FPS, lo que otorga una destacada fluidez respecto a la consola híbrida.
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